Ya en otro espacio hemos tratado el tema de Ecatepec y los posibles cochupos entre el grupo de Eruviel Ávila Villegas y de Higinio Martínez Miranda, la negociación es parte del desarrollo cupular en la política y a nadie le deba sorprender que gane quien menos se piensa, pues en la mesa se firman los convenios y más cuando no se está a la vista una votación ostentosa como la de 2017, es decir, se presta para convenir sin cortapisa.
En el cao de Coacalco, la situación es muy especial, pues a pesar de tratarse de un municipio relativamente pequeños encierra mucho interés el desarrollo preelectoral para propios y extraños y el panorama no es muy halagador para nadie, es decir: la moneda está en el aire.
Por una parte, Morena, el arrasante Movimiento de Regeneración Nacional que apabulló al PRI en la elección pasada, hoy se enfrenta a un panorama muy lejos del de la elección anterior, con una figura presidencial atacada por todos los grandes monopolios de la comunicación al verse afectados en sus intereses se han declarado enemigos jurado de Andrés Manuel López Obrador, pues dejaron de percibir las millonadas a las que estaban acostumbrados y eso se traslada al plano municipal.
Darwin Eslava Gamiño, ha sido objeto de múltiples ataques personales y a su administración por errores visibles, en el mayor de los casos de sus colaboradores, pero se ha mantenido con programas populares que le han ayudado a paliar los desencuentros, le ha faltado, efectivamente un proyecto innovador que convenza a la ciudadanía de que no se equivocó al votar contra todo lo que había.
Aún así, Darwin será el candidato que buscará la reelección por Morena y es hoy por hoy, el enemigo a vencer, no hay una estructura visible para los trabajos preelectorales y tampoco se sabe de una estructura formal morenista para promoción del voto, así que su esperanza se podría centrar en el voto de la gente que votó en 2017 por AMLO, pero tendrá que sacar el As de la manga para que sus operadores políticos le ayuden a lograr el triunfo, yo le daría un 38 por ciento de posibilidades.
Por otro lado la alianza “Va por el Estado de México” que conforman el PRI-PAN y PRD, tiene su vista puesta en el dos veces alcalde David Sánchez Isidoro, porque es el único que podría nivelar las condiciones, apoyado por una férrea estructura leal a su persona que ha formado a lo largo de los años, no hay más o es David o es David, pero pesa en su contra una resolución que no se ha movido por parte de la SCJN, que de resolverse en su contra podría inhabilitarlo por hasta 3 años y meses de algún cargo administrativo, los amparos y negociaciones que puedan lograr están supeditados a esa negociación.
Los esfuerzos que hizo el sedicente panista Benjamín Alfaro en contra de David Sánchez se quedaron ya sin aire pues en las negociaciones le corresponde al PRI poner candidato y si no lo logra Sánchez Isidoro, lo más probable es que sea uno de sus allegados quien encabece la juta electoral y se menciona que el actual presidente del PRI, Martín Muñoz podría ser el elegido, muy a disgusto de Gabriel Vázquez el candidato perdedor con Darwin Eslava, si quedara David le daría un 35 por ciento de posibilidades, de ser otro el candidato, su la esperanza de la alianza bajaría a 20%.
Pero en el escenario aparece otra opción de la mano del PVEM y de Alejandro Gamiño, el ex alcalde que logró elevar el nivel de vida de los coacalquenses en su momento y que después fue víctima de persecución política.
Alejandro Gamiño podría ser la sorpresa pues está posicionado y cuenta con una buena estructura para enfrentarse al Goliat Moreno, pero dependerá de una buena propuesta y de un verdadero aparato de movilización lo que le puede ayudar en su empresa, no es fácil, pero sí viable que la lucha sea entre los Gamiño en el caso supuesto de que a David no lo deje llegar la resolución pendiente.
Yo a Alejandro Gamiño le daría también un 35 por ciento de posibilidades actuales, cada uno a la espera de que sean ratificados como candidatos oficialmente.
