Connotados líderes de morena que no pertenecen a la corriente política del Grupo de Acción Política (GAP) que encabeza el senador Higinio Martínez Miranda han calificado de vergonzosa la actuación del tlatoani de Texcoco al retar primero a debate al presidente de Huixquilucan, Enrique del Villar y luego recular y mandar públicamente al ruedo a cinco alcaldes de Morena, incondicionales de él, entre ello mencionó al mismo alcalde de la capital mexiquense, denostando la investidura de los alcaldes y demostrando que solo son peones a su servicio, de tal manera que en una forma chusca de hacer política la alcaldesa de Metepec, Gabriela Gamboa, mandó a hacer una caricatura en la que aparece como la mujer maravilla e intenta humillar a Enrique Vargas aduciendo sus 20 mil títulos, como si los papeles le dieran la supremacía y una victoria anticipada en un debate que nunca aceptaría el mandatario Huixquilucense.
Hay quien dice que un doctorado no es sinónimo de sabiduría, para no ser tan coloquial en el término, la famosa caricatura publicitada en varios medios de comunicación, solo dejaron en claro la calidad política y humana de la alcaldesa, pero lo realmente preocupante para las huestes morenistas es la cínica demostración de poder del texcocano, quien además demostró ue la LX Legislatura baila al son que les toque y su proyecto de Ley que reforma el número de síndicos y regidores fue aprobada de manera urgente en tan solo un mes, cuando hay un sinnúmero de Propuestas en el archivo en espera de negociaciones e interés del grupo mayoritario del congreso local.
Higinio Martínez ha demostrado ser un excelente vendedor de sueños y un maestro de la estrategia política, por no decir manipulación y tiene en esto momentos a diputados y alcaldes comiendo de su mano en busca de que el jerarca apoye sus ansias de reelección o de ocupar otro puesto de elección popular, unos por miedo y otros por conveniencia, pero todos demuestran una lealtad envidiable.
En cuanto Higinio desechó el debate con Enrique del Villar y este le contestó que no lo haría con sus esbirros, de inmediato salieron diputados a exigir claridad en los sueldos del cabildo y presidencia del gobierno de Huixquilucan, además de un ataque mediático en contra del alcalde que no logró hacer mella en su imagen y sí atraer más simpatías a su persona.
El “ordenar” a cinco alcaldes a hacer su voluntad, así como lo hizo con sus diputados, Higinio alebrestó la gallera y docenas de consejeros ahora buscarán desbancar al aún poderoso secuestrador de Morena en el Estado de México y establecer los mecanismos adecuados para que el partido deje de ser rehén de un solo grupo o tribu emanada del PRD.
Ahora más que nunca, el cúmulo de políticos que no comparten la ideología higinista se aglomerarán en torno a un proyecto que retome los estatutos de su líder moral Andrés Manuel López Obrador, pero la resolución de la Corte, el reacomodo de fuerzas en al Comité Ejecutivo Nacional y la reestructuración de la dirigencia estatal dictarán la agenda mediática para el futuro de Morena en la entidad.
Hay que recordarle a Martínez Miranda que la fuerza Ecatepec ya lo detuvo en su intento por dividir al municipio, nadie se mete con el municipio más poblado y menos un fuereño porque hasta los enemigos se juntan para defender su territorio como pasó con su ingeniosa idea de crear el municipio de Azteca: PRI,PAN,PRD y sociedad civil cerraron filas y tuvo que recular también y dejar “pa´luego” su ocurrencia.
Ahora el camino a su sueño de ser gobernador se le va llenando de piedritas y aunque es prematuro, Yeidkol, Horacio Duarte, Alejandro Encinas y hasta López Gatell lo pueden desbancar de sus aspiraciones y arrinconarlo en su querida ciudad de Texcoco, de donde nunca debió salir, tiempo al tiempo.
