Los contribuyentes mexicanos pagan las nóminas de empleados en los CDE de los partidos en cada Estado…Todo lo que se reparte entre la “dirigencia” del partido, lo aporta el causante mexicano… El millonario presupuesto anual, — que se duplica en “años electorales”, —más los gastos de mantenimiento del inmueble que ocupa es “autorizado” por el Congreso de la Unión en estricto respeto a los ordenamientos Constitucionales, que ”aprobó” el Congreso de la Unión, el meollo: los legisladores a modo acomodaron el armazón legal, para que los causantes mexicanos, le paguen “todo” a los paladines de la democracia que están dedicados a todo, menos a respetarla…
Se puso de manifiesto que en el peloteo de todos contra todos, la prioridad fue: acusar a sus homólogos, “denunciar” fortunas, — bien o mal habidas, —de sus contrincantes; condenar las medidas de las cúpulas de otros memebretes partidistas; presentar a su partido como el único salvador de México, — no de los mexicanos, — con los gastos que conllevan las mil y una declaraciones a cargo de los causantes mexicanos…Opereta partidista puesta en escena, par
