Por: Mapy Escobar
Toluca, México.- Pese a la prohibición de la quema de pastizales en el ámbito tanto rural y/o forestal esta práctica se sigue realizando de manera inconsciente y en muchas ocasiones cerca de zonas urbanas donde existen viviendas, escuelas, carreteras, afectando tanto al medio ambiente como a la población.
La población que respira el humo sobre todo se ha visto afectada por problemas de salud dado que el humo está hecho de una compleja mezcla de gases y partículas finas que se producen durante la quema. La mayor amenaza para la salud por parte del humo proviene de las partículas finas, partículas microscópicas pueden penetrar profundo en los pulmones, pueden provocar una serie de problemas de salud, desde irritación en los ojos y goteo nasal, hasta enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas.
La quema de pastizales es una práctica tradicional para preparar la tierra después de las heladas para la siembra y responde directa o indirectamente a las acciones de la gente por calentar la tierra, sin tomar en consideración los riesgos que esta práctica implica, por ejemplo, el fuego puede escapar al control cuando los granjeros queman el suelo para que la tierra sea más fértil (se hace referencia a éstos como incendios descontrolados o accidentales por el uso de los suelos). Los incendios pueden salirse de control y expandirse muy extensamente sobre las áreas.
Debido a que la gente sigue realizando estas quemas de manera tradicional, la secretaria del medio ambiente ha emitido ciertas recomendaciones, como el de preparar un plan de prevención para una quema controlada, si el clima es seco y está ventoso, no enciendas la quema, si las condiciones son propicias y decides iniciar la quema que sea lugar abierto, lejos de los árboles, las hojas y las ramas secas, limpiar la tierra de basura o desperdicios 3 metros a la redonda, nunca dejar solo el fuego, no realizar quema de restos de poda, basura, rastrojo, desmalezamiento de terrenos etc.
Al realizar la quema en cada predio deben existir medidas preventivas que estén al alcance, tales como: calles cortafuego, limpieza de alambrados, construcción de reservorios de agua, disponibilidad de elementos de combate (palas, chicotes, machetes, etc.), tener cerca pileta de natación, o tanque australiano llena durante todo el año.