Como bien lo dice el dicho, “No hay fecha que no se llegue, ni plazo que no se cumpla”, este 3 de marzo el rector Alfredo Barrera Baca rendirá su cuarto y último informe de actividades de la Administración 2017-2021 de la Universidad Autónoma del Estado de México.
Es un informe muy esperado por lo que ha sucedido alrededor de la administración interna, por los logros, por los cambios administrativos y será el escenario que podría prestarse como pasarela para quien o quienes aspiran a suceder al actual rector, por ello, no solo la comunidad estudiantil, la plantilla laboral y el cuerpo académico estarán pendientes, sino que también la clase política deberá estar muy atenta del desarrollo y de los resultados que se anuncien ese día.
A pesar de los constantes ataques que sufrió de forma permanente por propios y extraños, se puede calificar de sobresaliente la labor realizada por el actual rector quien tuvo que enfrentar ataque desde la LX Legislatura y lo peor: un fuego amigo que siempre estuvo al acecho de cualquier movimiento para demeritar las acciones realizadas en la máxima casa de estudios del Estado de México.
A nivel personal creo que, además de los logros académicos y de infraestructura, Barrera Baca sentó las bases que permitirán a nuevo rector, sea del género que sea, llegue con finanzas sanas y con cargas menos pesadas en cuanto a la deuda histórica que venía arrastrando desde hace muchos años.
También fue capaz de sortear los conflictos internos tanto del magisterio como de estudiantes que tuvieron tomadas las instalaciones y mostró una actitud negociadora y con un manejo de crisis que ya quisieran muchos políticos.
El Patio del Centenario del Edificio de Rectoría será la sede una vez más de tan importante evento en el cual la comunidad universitaria estará atenta de los logros que alcanzó esta casa de estudios en los ámbitos de la docencia, la investigación, la difusión, la cultural, la extensión y vinculación durante el último año y los cuatro de esta gestión.
Entre los avances alcanzados destacan el importante incremento en la matrícula escolar, gracias a ello se beneficiaron 10 mil estudiantes más que pudieron acceder a esta casa de estudio recibidos desde 2017, también es menester mencionar el nuevo Plantel de la Escuela Preparatoria en Almoloya de Alquisiras; la construcción del Ágora de Cénide, espacio de expresión y creación universitaria; la renovación de instalaciones de la Facultad de Humanidades, y la edificación de los gimnasios de la Facultad de Ciencias de la Conducta, así como en el Centro Universitario UAEM Amecameca.
Actualmente se manejan mucho nombres como de los posibles sucesores del rector Alfredo Barrera, se mencionan también a mujeres que aspiran ser, por primera vez rectoras de la UAEM, pero no hay nada escrito, lo que sí es real es que dependerá mucho de los movimientos que se perciban ese día como se darán las especulaciones sobre quien realmente tiene los atributos para aspirar a dirigir los destinos de esta institución amenazada por intereses externos que buscan de alguna manera injerir en lo que tendría que ser un proceso autónomo, pero que la política trata de manipular, mejor dicho políticos que sirven a intereses nada correctos.
En fin, habrá que esperar los acontecimientos alrededor de ese cuarto y último informe de labores y los movimientos que alrededor se presenten, lo que nadie podrá negar es el impulso y los cambios para bien que logró Barrera Baca y como se dice coloquialmente haiga sido como haiga sido el rector salió avante y no se hundió la nave.